El primer libro que publicaré será:

domingo, julio 20, 2014

La ladrona de libros

 “Un libro debe hurgar en las heridas, provocarlas incluso; un libro debe ser un peligro” Emil Ciorán




Tanto el libro como la película “La ladrona de libros” inicia y termina con una narradora muy peculiar, una voz que en ocasiones simula omnipresencia y potestad absoluta sobre la vida y la muerte; tuve que verla dos veces, prestándole más atención, para enterarme que no era Dios sino que era el Ángel de la Muerte quien se encariñó con la vida de algunos de sus sometidos.
Esta obra maestra de la sensibilidad humana inicia la película con una vos que habla desde la oscuridad, mientras se va aclarando el cielo lleno de nubes hermosas nos habla casi al oído, con una confianza como sí nos conociera, diciéndonos: “Usted va a morir… es una realidad, por más que intente evadirlo… así que mi consejo –para cuando llegue el momento- es: No se alarme”. Esta misma voz cierra la película.

CONTEXTO

El contexto histórico de la trama dura aproximadamente 8 años.  Desde febrero de 1938, día en que Liesel, la protagonista abandona el tren en el que llega con su madre, con su hermano muerto a su nueva familia y el fin de la segunda guerra mundial, en 1945 cuando Alemania es invadida por Estados Unidos.

Aunque la guerra no es el centro de la historia, es imposible aislar la cinta de los sucesos durante la segunda guerra mundial. Una Alemania fortalecida con un nazismo desbordante y creciente. Un pueblo fuerte que está a punto de invadir a Rusia, según la escena en la que Max, un judío que protege su nueva familia, puede leer el periódico y se entera de las noticias.

El director de la cinta, junto con su equipo de montaje, arte y fotografía, elabora su ópera prima con mucho cuidado, teniendo en cuenta  los detalles históricos como La Noche de los vidrios rotos, en Noviembre de 1938, donde más de 1000 sinagogas fueron quemadas, más de 7000 negocios de los judíos saqueados y se calculan unos 30.000 judíos arrestados solo por el delito de ser judíos; y creando una escena de contrastes apabullantes que inicia con un coro bello y organizado, que canta un himno en honor a Hitler y al nazismo, mientras que los vidrios de las calles alrededor se vuelven añicos y las dos escenas se mezclan con gran elocuencia.

ARGUMENTO

Según las críticas el guion para este película se trabajó muy de cerca con el escritor del libro, para que fuera exacto y ajustado a lo que pretendía el escritor australiano Markus Zusak, quién lo publicó en 2005 y en 2009 estaba por más de 105 semanas en la lista best seller del New York Times.

Esta jovencita descubre el amor a los libros desde que su padre le enseña a leer. El argumento cinematográfico le da mucha importancia a ciertos diálogos que son fuertes y abrumadores, puestos en el momento correcto, con el objetivo de ponernos a pensar. Inicialmente, la esposa del alcalde donde vive le presta su biblioteca personal y ella descubre todo un mundo de palabras, significados y pasiones en sus libros, cuando se le niega el acceso a esa biblioteca, se le ocurre tomarlos prestados y se convierte en una cleptómana intelectual y sabia.

En abril de 1939, en el cumpleaños de Hitler, fiesta nacional alemana, se hace una pila de varios metros de libros, la cual es incinerada mientras se canta, se gritan vivas a la Nación, a su Führer y al final de la hoguera de libros, Liesel recupera un ejemplar de El hombre invisible de H. G. Wells, escritor inglés, que se vuelve su tesoro, junto con lo único que le quedó de su hermano que era un libro llamado Manual del Sepulturero.



EL GUIÓN

Los diálogos son de una riqueza exquisita, ya dije que son usados en los momentos exactos durante el hilo conductor de la trama, y se convierten en un arma poderosa:

“Una persona sólo es tan buena como su palabra”.

“Fue mi culpa que Max esté enfermo, porque yo fui la que tuve la idea de entrar nieve a su sótano… ¿por qué lo hicimos? Su padre le responde: Porque teníamos que hacerlo”.

Morimos de hambre y tú robando libros” Le dice Rudy Steiner, su níveo amor y mejor amigo, añadiendo: “¿Se te ocurrió mirar en la cocina?

“La memoria es el escribano del alma” Aristóteles.

“¿Qué fue lo que hizo? Le recordó a las personas sobre su humanidad”.

“¡No me has perdido Liesel! Le dice Max, el judío que protegían en el sótano, enfatizando: “Siempre podrás encontrarme en tus palabras… Ahí es donde viviré”.



ARTE Y FOTOGRAFÍA

Esta película es capaz de sacarle lágrimas a cualquier ser humano, que se deje tocar su corazón. Más allá de la historia o del hecho de entretener, la fotografía y el arte se conjuga con la música para tocar las fibras del alma y sentir el dolor ajeno como si fuera propio.


Cualquier persona puede identificarse fácilmente con sus personajes. Los encuadres y emplazamientos son correctos, a mi forma de ver, sin ser crítico profesional de cine, la iluminación y los paisajes son de gran belleza y el ambiente es muy artístico.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario