El primer libro que publicaré será:

martes, mayo 17, 2016

A un desconocido

Abro la puerta
Y pasas presuroso como corcel indomable,
Segundos antes era feliz
Pues todo en mi ser estaba en orden,
No te conocía, pero ya sentía florecer la primavera en tus ojos...
En tus ojos ojos claros.

Había inventado la poesía tantas veces...
Pero tu tez se esfumó como el alba,
En ese instante perfecto...
Pero te fuiste...
Luciendo esa barba primordial
Tal caballo su crin recién bañada...
Y no lo notaste...
Alumbraste refulgente como sol
Esta oscura mañana...
Te llevaste la inspiración
Quizás con la premura de Prometeo
(del cleptómano primero).

Nunca lo sabrás...
Ahora sólo soy polvo:
El rojo Adán
Tras una combustión instantánea...
Recordando a la mujer de Lot.

A un desconocido

Abro la puerta
Y pasas presuroso como corcel indomable,
Segundos antes era feliz
Pues todo en mi ser estaba en orden,
No te conocía, pero ya sentía florecer la primavera en tus ojos...
En tus ojos ojos claros.

Había inventado la poesía tantas veces...
Pero tu tez se esfumó como el alba,
En ese instante perfecto...
Pero te fuiste...
Luciendo esa barba primordial
Tal caballo su crin recién bañada...
Y no lo notaste...
Alumbraste refulgente como sol
Esta oscura mañana...
Te llevaste la inspiración
Quizás con la premura de Prometeo
(del cleptómano primero).

Nunca lo sabrás...
Ahora sólo soy polvo:
El rojo Adán
Tras una combustión instantánea...
Recordando a la mujer de Lot.

A un desconocido

Abro la puerta
Y pasas presuroso como corcel indomable,
Segundos antes era feliz
Pues todo en mi ser estaba en orden,
No te conocía, pero ya sentía florecer la primavera en tus ojos...
En tus ojos ojos claros.

Había inventado la poesía tantas veces...
Pero tu tez se esfumó como el alba,
En ese instante perfecto...
Pero te fuiste...
Luciendo esa barba primordial
Tal caballo su crin recién bañada...
Y no lo notaste...
Alumbraste refulgente como sol
Esta oscura mañana...
Te llevaste la inspiración
Quizás con la premura de Prometeo
(del cleptómano primero).

Nunca lo sabrás...
Ahora sólo soy polvo:
El rojo Adán
Tras una combustión instantánea...
Recordando a la mujer de Lot.